1. Uno es uno por ser el primer postulado desde dirección: ¿Qué hay entre el sueño y la vigilia? Eso intento averiguar; las cosas se descubren cuando se expresan.
2. En una lista de prioridades creo que la butaca está primero que la cama.
3. Si en 1917 después de la revolución bolchevique, el cine pasó a ser un medio de transmisión y expresión de ideas, el montaje, el espíritu, las formas de puesta en escena de la Rusia de la época han llegado a las contemporaneidades del cine tercer mundista, que es el que más sufre de dominación económica y cultural. Estudiar el montaje ruso es un obligado. Cambiarlo, un compromiso.
4. De acuerdo con Caicedo: El cine, de todas las expresiones artísticas, es la que menos demanda para su aprehensión.
5. Al cine se entra callado y se sale impresionado; allí está prohibido hablar.
6. Un Film se escribe en la pantalla y en dos dimensiones.
7. El Cine no imita a la vida; la vida imita al cine. A la mierda la Diegesis y la mimesis.
8. Seguro como queriendo aprender la belleza en abstracto, en su función más inútil, es que las mujeres feas en el cine, me parecen las más hermosas.
9. Los cognitivistas han criticado lo que para ellos- no sé si ya para mi- es el hermetismo, las ínfulas y la tautología del discurso de la teoría cinematográfica en general y de la psicoanalítica en particular. En La Habana, lo digo, un puro puede ser sólo un puro.
10. Primero le temí a mis Rushes de montaje. Ahora, en la etapa más administrativa y menos creativa que he tenido en un año, empiezo a temerle a las secuencias finales.
Como Bonus: una Citación a la Orden de la Lista y de mis lecturas actuales:
“El mecanismo productor de imágenes cinematográficas, por su manera de
funcionar, es, entre todos los medios de expresión humana, el que mejor limita
el funcionamiento de la mente en estado de sueño […] La noche paulatina que
invade la sala equivale a cerrar los ojos: entonces comienza en la pantalla, y
en el hombre, la incursión por la noche de la inconsciencia.”
-Luis Buñuel, Conferencia de la Universidad de México, 1958. Extracto que el lector puede buscar en sus memorias “Mi último Suspiro” (“Mon Dernier Soupir”) editadas por Debols!llo, 2005, Barcelona, España-
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